No ha pasado ni una semana desde que la envié a reparar y ya tengo mi consola de vuelta. Bueno, eso no es del todo cierto, ya que me han enviado una consola nueva (no sé si nueva a estrenar o nueva reparada, pero los plásticos no están amarillentos).

Sé que ha habido gente que ha tenido problemas con el SAT de Nintendo, pero yo, basándome en ésta, mi única experiencia, no puedo hacer otra cosa que "ponerles un 10".