Bueno, pues este 2009 se acaba. Y, aunque algunos hemos empezado a ver "brotes verdes", como dicen por ahí, tengo la esperanza de que 2010 sea mejor. Aunque, en el fondo, sé que va a ser un año igual de duro o más que el que estamos a punto de abandonar, pero lo afronto con mucha ilusión y optimismo.

Al igual que la economía, el ritmo de publicación del blog ha vuelto a niveles de 2005. Ha sido un problema de tiempo. No he encontrado los momentos para ponerme a escribir. Porque sí que tengo algunas cosas que contar: sobre la moto, sobre el móvil, sobre los libros que leo, las películas que veo y los videojuegos que voy completando. El día que no tenga nada que contar será el momento de pasar página, pero ese día no ha llegado todavía.

En fin, pasadlo muy bien esta noche y, por supuesto, el resto del año.

Abrazos.