Este mes estamos de novedades calentitas en Gran Turismo 5, cuando va a hacer un año de su salida al mercado.

Primeramente, como celebración del campeonato del mundo de Formula 1 conseguido por Sebastian Vettel, a los mandos de un Red Bull, Poliphony nos regala el prototipo que incluyeron en el juego:

Una auténtica bestia parda de un porrón de caballos, que alcanza los 400 km/h y que se ciñe a las curvas como si fuera sobre raíles (bueno, casi).

La segunda es que, la semana pasada, liberaron la actualización gratuita a la versión 2.0 del juego. Incluye un montón de correcciones y mejoras, que habrá que ir desgranando según continúe jugando.

Por último, hoy han lanzado el primer DLC (contenido descargable) de pago, que consiste en un par de circuitos muy apetecibles (Spa y Kart Space), un buen puñado de coches, en su mayoría japoneses, y un pack de monos, cascos y demás parafernalia. Probablemente sea el primer DLC que adquiero, sobre todo por los dos circuitos, que me llaman bastante.

Yo, por mi parte, sigo jugando de vez en cuando. No todos los días, como al principio, pero alguna sesión con dos o tres carreritas sí que me llama. Y me sigo divirtiendo como el primer día. Lo que debería hacer es probar el online, pero me da pereza, la verdad. Las carreras en el modo GT son más inmediatas.