Por fin, tras varios meses barruntándolo, y tras una semana de trabajo más "intenso", hoy comienza una nueva etapa en el blog. Es una nueva etapa que recae más en el diseño y lo técnico que en el concepto del blog propiamente dicho.

Como comentaba, desde el punto de vista técnico, el blog deja de estar alojado en la plataforma Blogger. Ahora en realidad es una web estática (nunca fue otra cosa) construida con Sculpin, que es una herramienta desarrollada en PHP que permite generar webs estáticas a partir de unas reglas y de un conjunto de ficheros fuente. También he aprovechado para darle un lavado de cara al diseño, ya que hacía muchos años que no lo modificaba, y alinearlo con las últimas tendencias.

Captura ¡VAPF! Captura ¡VAPF!

En el enfoque de los contenidos no voy a realizar ningún replanteamiento, al menos por ahora. Estos días, revisando entradas antiguas, he visto cómo han ido evolucionando paulatinamente con el transcurrir de los años. Los primeros años escribía más entradas. Muchas de ellas se caracterizaban por ser cortas y referirse a pequeñas anécdotas personales o algo que había visto en algún sitio que me había hecho gracia. En aquella época las redes sociales no existian o, al menos, no estaba tan extendido su uso. Este tipo de entradas ahora pueden ser objeto de un comentario en Facebook, una foto en Instagram o un simple tweet. También es curioso que el resto de entradas, de enfoque más parecido al actual, como los análisis de libros o videojuegos, tenían unas fotos de tamaño mucho más pequeño.

El proceso de migración ha sido entretenido y me ha permitido aprender bastantes cosas. Me lo he planteado como un proyecto "profesional" y, lo más interesante, ha sido poder aplicar un enfoque ágil. Es decir, tener lo que se denomina un "mínimo producto viable" y, a partir de ahí, ir mejorándolo. Para llegar a ese mínimo, como veremos ahora, el plazo es de una semana.

Fue el pasado lunes cuando me di cuenta de que, o lo hacía así, o no acabaría nunca. Mi primer objetivo era demasiado difuso: quería "migrar el blog a un servidor propio, usando Sculpin para su construcción y algún tema visual basado en Bootstrap". De primeras parece algo bastante concreto pero, si te pones a desarrollar la idea, van surgiendo demasiadas ramificaciones. Para empezar, busqué algún script que me ayudase a hacer la migración, ya que no iba a copiar y pegar a mano quinientas y pico entradas. Encontré uno que podía servirme como punto de partida, pero tenía que añadirle cosas. Una vez que me puse a ello, se me iban ocurriendo mejoras que añadir al script. Enseguida me di cuenta de que, así, no iba a llegar a ningún lado. Aunque mi intención era (y así ha sido) liberar todo el código que haya desarrollado para este tema, teniendo en cuenta la restricción temporal, no era necesario que el código estuviera perfectísimo ni que fuera de utilidad para todo el mundo que quisiera hacer algo parecido. Por cierto, el script de migración está en mi Github. Tengo pendiente refactorizarlo y desacoplar lo que pueda ser de utilidad general de lo que me ha servido a mí para mi propósito particular.

Algo parecido ocurrió con el diseño y con el alojamiento. Me podía haber perdido por las ramas y todavía estaría añadiendo pijaditas al diseño o pensando en qué proveedor de VPS lo iba a alojar. Hay cosas que fallan en el diseño; las iré corrigiendo sobre la marcha. El proveedor elegido es DigitalOcean, que no es el más barato (OVH costaba un poco más de la mitad), pero ya lo conocía. Habrá tiempo de moverlo más adelante. También quería haber aprovechado para haber automatizado mejor el despliegue del servidor y la web; queda para más adelante. El requisito mínimo era tener el servidor con Nginx, SSL y HTTP/2.

De momento le dedicaré un día más para pulir algún tema que tengo detectado y, el resto, los iré anotando como issues en Github para darles salida cuando pueda.

En fin, espero que el nuevo diseño no desagrade demasiado y nos sigamos leyendo por aquí.